Gusano de la harina

Si queremos preservar el planeta en el que vivimos, debemos de preocuparnos por la contaminación ambiental y tomar cartas en el asunto. En especial en lo que respecta a la contaminación por plásticos. Ya que, en su mayoría, los productos fabricados a base de plástico no son biodegradables. Esto es algo que supone un grave problema para la vida en la Tierra en un futuro que está más cerca de lo que parece. Por suerte, diversas personas alrededor del mundo están trabajando en estudios para tomar cartas en el asunto. Es así como se dio a conocer la importancia del gusano de la harina para combatir la contaminación de plásticos.

¿Qué es el gusano de la harina?

Antes de proceder a hablar sobre la investigación centrada en este insecto, nos detendremos un poco a hablar sobre qué es el gusano de la harina. Ya que seguramente es la primera vez que escuchas hablar sobre él.

Si bien es conocido en la cotidianidad como gusano de la harina o escarabajo de la harina, su nombre científico es Tenebrio molitor. El mismo, según su taxonomía, es de tipo clase Insecta, del orden Coleoptera y de la familia Tenebrionidae.

Este es un insecto que, en su fase adulta, tiene una forma similar a la de un escarabajo. No obstante, su uso y comercialización se realiza, principalmente, en su primera fase, que es la de larva. De allí que sea más conocido como gusano de la harina que como escarabajo de la harina.

En la mayoría de los casos, el Tenebrio molitor es empleado como alimento para diversos tipos de animales. Principalmente para aves, peces y reptiles. Aunque a partir de enero del 2021 se aprobó su consumo como alimento para humanos. El mismo se caracteriza por estar compuesto de un gran porcentaje de proteínas.

¿Por qué el gusano de la harina puede reducir la contaminación de plásticos?

En enero de 2021 un grupo de investigadores de la Universidad de Stanford publicó un estudio centrado en este pequeño insecto. El mismo lleva por título “Enhanced Bioavailability and Microbial Biodegradation of Polystyrene in an Enrichment Derived from the Gut Microbiome of Tenebrio molitor (Mealworm Larvae)”. Lo cual en su traducción al español puede entenderse como “Biodisponibilidad mejorada y biodegradación microbiana del polietileno en un enriquecimiento derivado del microbioma intestinal de Tenebrio molitor (larvas de gusano de la harina)”.

Durante esta investigación los gusanos fueron puestos a prueba en una alimentación a base de plástico. Específicamente polietileno que, por si no lo sabías, es uno de los tipos de plásticos más utilizados en el mundo. Es el que se emplea para la fabricación de bolsas, tazas desechables o juguetes.

Por ello se estima que, al año, se producen unos 80 millones de toneladas de polietileno. El cual, a su vez, puede tardar en descomponerse de 500 a 1.000 años. De allí nace la preocupación que llevó a la realización de este estudio.

Gracias al mismo, se descubrió que el gusano de la harina es capaz de sobrevivir en una dieta compuesta únicamente por el consumo del polietileno. Esto ya de por sí es beneficioso para el medio ambiente, pero los hallazgos van mucho más allá. Se descubrió que dichos gusanos, pueden transformar en fertilizante el plástico que consumen.

¿Cómo logra transformar el plástico en fertilizante?

Sin duda alguna este hallazgo es realmente sorprendente e innovador, y ahora te estarás preguntando cómo el gusano de la harina puede transformar el plástico en fertilizante. Esto se debe, principalmente, a un tipo de bacteria que habita en el intestino de este insecto.

Dichas bacterias se encargan de degradar el plástico que consumen. Claro está, el hecho de que los gusanos sean capaces de masticar este tipo de plástico logra que el proceso se lleve a cabo en menor tiempo.

De ese modo, el plástico que consumen termina convirtiéndose en un 50% de CO2 y otro 50% en desechos biodegradables. Son precisamente estos desechos biodegradables los que se pueden utilizar para la fabricación de fertilizantes.

Gracias a esto, nos hallamos ante una posibilidad de reciclaje realmente novedosa e impresionante. Por medio de estos pequeños gusanos se ha hallado finalmente una forma de transformar el plástico en un componente que se encargará de ayudar al medio ambiente mediante la fertilización de suelos.

Durante la investigación realizada los gusanos consumieron por día una cantidad de polietileno similar al tamaño de una pastilla. Estos gusanos pueden ser reproducidos mediante granjas de insectos. Por lo que, aunque el cambio pueda parecer pequeño, gracias a la cantidad de gusanos de la harina que existen en el mundo, el cambio se notaría enormemente.

Ventajas de la labor del gusano de la harina para el medio ambiente

Este descubrimiento, además de ser impresionante, nos presenta una amplia cantidad de ventajas para el medio ambiente. La labor de los gusanos de la harina es realmente beneficiosa para el planeta tierra. Algunos de los beneficios más notables de esto son:

  • Reducir la cantidad de plástico contaminante en el planeta
  • La enorme cantidad de polietileno que se utiliza día a día en el mundo puede reducirse notablemente. Con los gusanos de la harina podremos despedirnos de las montañas de plástico que perjudican a nuestro planeta.
  • Posibilidad de degradar el plástico
  • La posibilidad de degradar el plástico por medio de estos insectos es realmente increíble. Se estima que solo un 10% del plástico es realmente reciclado. Por lo que, con estos gusanos, ese porcentaje aumentaría exponencialmente.
  • Fertilizar los suelos
  • Gracias a la manera en la que desechan el plástico que consumen, se puede aprovechar para la fabricación de fertilizantes. Así, un agente que anteriormente era contaminante, beneficiará nuestros suelos para el cultivo.
  • Rapidez del proceso

El estudio demostró que los gusanos son capaces de expulsar el 100% de polietileno que consumen en 48 horas. Por lo que, si por este estudio se desarrolla una técnica de reciclaje, el proceso sería veloz. Por donde se vea, es una posibilidad realmente beneficiosa para el medio ambiente y la humanidad en general.